
Por M. Carmen Riu de Martín
Teresa Lanceta (Barcelona, 1951) expone un gran repertorio de tapices en el (MACBA) Museu d’Art Contemporani de Barcelona hasta el 11 de septiembre de 2022 y en el IVAM, del 6 de octubre al 12 de febrero de 2023. Se ha dividido la muestra en diversas secciones temáticas, en las que se presentan obras creadas desde sus inicios en los años setenta hasta la actualidad.
Como es lógico, a lo largo del tiempo sus diseños han ido evolucionando, si bien éstos se han caracterizado por la combinación de formas geométricas y paisajes. No realiza dibujos o proyectos antes de elaborar sus piezas sino que, a través de un esquema mental, las desarrolla mediante la combinación de colores.
En primer lugar, el título de la muestra ‘Tejer como código abierto’ significa para ella la colaboración con otros artesanos y artistes; además, la artista no da sus proyectos por finalizados, sino que éstos son un punto de partida para otros nuevos, como si se tratara de un proceso en evolución. Su trabajo la ha llevado a acercarse a otros autores y sociedades, como a la cultura bereber de Marruecos y a su práctica ancestral de tejer, en la cual las mujeres elaboran esta tarea en su propia casa. Durante su estancia en el Atlas Medio colaboró con ellas, pues le gusta tejer con otras personas.

En la exhibición había telas tejidas con algodón y lana, algunas se hallaban montadas sobre bastidores, otras sueltas y colgadas, de tal modo que se pudieran observar ambas caras. En otras ocasiones, como en el repertorio basado en su vida durante veinte años en el barrio del Raval de Barcelona, se trataba de telas teñidas y cosidas, en las cuales a veces el pigmento solo podía observarse por la cara anterior.
En algunos ejemplares había telas reaprovechadas. Allí estuvo en estrecho contacto con la comunidad gitana y en la muestra había una sección de ‘Homenaje al Raval’, proyecto pensado durante los años 2019 y 2020 para la exposición, y que se basaba en grandes formas geométricas: triángulos, cuadrados y rombos de tonos rojos y negros. Para ella el rojo se asocia a la vida y a la sangre, así como el negro es la oscuridad. En algunos ejemplares interpretaba el piso donde vivió y estos proyectos se hallaban acompañados con audios, en los que exponían anécdotas y vivencias del barrio. Como dato a mencionar, algunas de estas obras han sido realizadas también en coautoría… Leer + Revistart 211