A los 50 años de la muerte de Pablo Ruíz Picasso y a los 70 de sus primeras exposiciones en Italia. Se trata de una exposición-homenaje y documental, que celebra y se incluye en el gran Proyecto Internacional ‘Picasso Celebration 1973-2023’, desplegada en el suntuoso Claustro del Plátano, decorado con pinturas al fresco por Antonio Solaro, apodado ‘el Gitano’, a inicios del siglo XVI.
En el marco histórico del extraordinario monasterio de San Severino y San Sossio, una sede repleta de joyas monumentales y artísticas, así como documentales, se ha inaugurado una exposición, hasta el 14 de enero de 2024, que entrelaza admirablemente los documentos únicos conservados en dicho Archivo, procedentes de la correspondencia del senador napolitano Eugenio Reale, para sostener las exposiciones proyectadas en Roma y Milán de las obras de Pablo Picasso, en 1953, contra la adversidad de un sector político en su debut en las sedes institucionales italianas. Tales exposiciones llegaron a inaugurarse, gracias al esfuerzo de Reale, tranquilizando al artista malagueño tras el inicial rechazo de su arte, como documentan las cartas conservadas en el Archivo napolitano. Así pues, se cumplen además 70 años de aquellas relevantes exposiciones.
Ahora, se trata de una experiencia inmersiva que ofrece a los visitantes, en especial a los más jóvenes, gratuitamente, la emoción de ‘vivir Picasso’, es decir, de conocer la trayectoria a través de sus obras más famosas, percibiendo la magia de la mínima pincelada. En realidad, una ocasión única para conocer al gran artista español y, para Nápoles, como subraya el Consejero del Turismo de la Región de Campania, Felice Casucci: “Picasso constituye una nueva atracción turística que, durante la apertura de la exposición, esperamos que la capital campana alcance una subida importante de turismo”.
De hecho, continúa Casucci refiriéndose a la sede del Archivo Napolitano, que ocupa el antiguo monasterio benedictino de S. Severino y S. Sossio, ubicado en el corazón del casco antiguo de la ciudad… Leer + REVISTART-219
Por Carmen del Vando Blanco