El joven pintor nos presenta una serie de trabajos donde admirar un estilo propio nutrido de la belleza y la superación personal. Varios de sus cuadros han participado en certámenes y han sido donados a proyectos benéficos como la Asociación Enach. García Azañón toma la realidad que le rodea como punto de partida, y utiliza el pastel para expresar las sensaciones que le produce ese alrededor. Retratos y escenas de tintes simbólicos, con la presencia del color, pero también del blanco y negro, alimentan un caminar plástico basado en las luces y las sombras, en técnicas pictóricas históricas que el artista reinterpreta para comprender la vida, como “un puerto nuevo al que llegar con cada obra y un dejar algo de mí en todas ellas”. – J.A.
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