Por Juan Mari Montes
Aunque todavía no es tan habitual ver a algún o alguna cantante aligerarse de ropa en el escenario con la naturalidad que podemos hacerlo cualquiera de nosotros en alguna de nuestras playas, desnudarse en el escenario, y no precisamente en sentido figurado, viene siendo una costumbre saludable, excitante y bastante bien aceptada por el público que suele recibir el hecho con muchísimo más entusiasmo que decepción.
Convendría, por tanto, defender y respetar la costumbre y comunicárselo oficialmente a la Policía de Murcia, que estos días nada menos que interrumpía una actuación de la cantante Rocío Saiz en el Festival del Orgullo de Murcia, cuando esta interpretaba con los pechos al aire, muy jovial y descocada, su versión particular de la maravillosa ‘Como yo te amo’, escrita en su día por el maestro Manuel Alejandro para Rocío Jurado.
Mucho me temo, sin embargo, que tampoco sobraría enviar el mismo comunicado a todas aquellas autoridades políticas que con cierto halo reaccionario han comenzado a invadir los salones y despachos de buena parte de los ayuntamientos españoles.
Confiesa la cantante Rocío Saiz, que viene realizando el mismo y reiterado streaptease en todos sus shows durante los últimos diez años como un modo de reafirmar su activismo feminista y su apoyo al colectivo LGTBI, soportando muy esporádicamente algún insulto aislado de algún energúmeno, pero sin que haya que lamentar o levantar acta de sucesos policiales comparables al sufrido en esta actuación que tal vez presagia el ambiente enrarecido que comienza a respirarse ante el desarrollo de ciertos pactos y otras maniobras en la oscuridad que se están cociendo estos días en ciertos gobiernos municipales… Leer + Revistart 217